Por Gustavo Mendoza
Los primeros años de los nuevoleoneses tras la creación del estado estuvieron marcados por diversas crisis e incertidumbres ideológicas, explicaron historiadores durante el Conversatorio sobre Política y Economía de Nuevo León, celebrado en el Patio Sur del Colegio Civil Centro Cultural Universitario.
La sesión estuvo compuesta por las mesas “De la Monarquía a la República en Nuevo León. Saldos de una transición” y “Etapas principales del desarrollo económico de Nuevo León”.
Al respecto, el doctor José Javier Villarreal, secretario de Extensión y Cultura, destacó la participación de la UANL en las conmemoraciones por los 200 años de Nuevo León como estado libre y soberano, pues la Máxima Casa de Estudios no fue ajena a este momento histórico.
“Nos reunimos en estas celebraciones por los 200 años de Nuevo León como estado libre y soberano. Y el estado surge como tal, también, con las cátedras en Derecho, que es raíz de nuestra universidad y que también cumplirá 200 años, y de Medicina y Farmacia. Es sintomático que la necesidad de la conformación de un estado en el país tenga relación con la necesidad de la cultura y la educación”, expresó José Javier Villarreal.
El conversatorio, coordinado por el Ciesas-Noreste, contó con la colaboración de la UANL, a través de la Secretaría de Extensión y Cultura junto a su Centro de Estudios Humanísticos, así como del Colegio de la Frontera Norte. Esta actividad se suma a las actividades por la conmemoración de los 200 años de Nuevo León, que organiza el Gobierno del Estado.
Abordan dificultades políticas en primeros años de Nuevo León
La primera mesa del conversatorio fue “De la Monarquía a la República en Nuevo León. Saldos de una transición”, en la que participaron Luis García García, catedrático de la Universidad de Monterrey (UDEM); Óscar Tamez Rodríguez, catedrático por la UANL; y la moderación de César Salinas Márquez, investigador del Centro Eugenio Garza Sada.
En la mesa se explicó cómo los primeros gobernantes y ciudadanos de Nuevo León se enfrentaron a crisis como la escasez de alimentos, falta de recursos económicos y luchas con los grupos nativos en reclamo de sus territorios.
“Teníamos un Nuevo León que estaba más preocupado por la pobreza que por el ejército de Santa Anna en 1934 y 1936. Más preocupado por las incursiones indígenas y que el estado estaba desarmado. Mientras en el país las disputas eran ideológicas, aquí no pasaba eso, había otras preocupaciones”, comentó el historiador Óscar Tamez Rodríguez.
Por su parte, el historiador Luis García cuenta cómo la clase gobernante de la entidad supo moldearse a las diferentes corrientes ideológicas que buscaban el poder desde la capital del país.
“Es interesante cómo la clase política nuevoleonesa sabe navegar en aguas turbulentas, tan difíciles en este momento, para no destruir al estado y empezar a tener una consolidación económica y regional. A pesar de tener la extensión territorial más pequeña, era el más poblado en estos momentos”, explicó el investigador Luis García.
Tamez recordó a Fray Servando Teresa de Mier como el primer diputado por Nuevo León, por lo que surge el primer documento cívico jurídico, un 31 de enero de 1824, aunque se publicaría el decreto para formar su estado libre y soberano hasta mayo del mismo año.
Narran cómo las familias y el ambiente cambió la economía de Nuevo León
Los apellidos familiares, el desarrollo tecnológico y factores medioambientales modificaron el perfil de la industria en la entidad, señalaron especialistas en la mesa “Etapas principales del desarrollo económico de Nuevo León”.
Con este diálogo cerró la primera jornada del Conversatorio sobre Política y Economía de Nuevo León, en el marco del 200 aniversario, celebrado en el Patio Sur del Colegio Civil Centro Cultural Universitario.
Los investigadores Mario Cerutti Pignat, por la UANL, así como Eva Rivas Sada, del Tecnológico de Monterrey, abordaron los diferentes factores que han dado identidad a la industria nuevoleonesa, bajo la moderación en la mesa de César Morado, coordinador del Centro de Estudios Humanísticos.
El historiador sobre la economía del noreste, Mario Cerutti, describió las diferentes dinámicas de la industria de Nuevo León, iniciando por el comercio, los préstamos, la minería, pasando por la producción de bebidas y alimentos hasta el fenómeno nearshoring.
Durante este proceso, los apellidos de las familias regiomontanas aparecen desde la segunda mitad del siglo XIX hasta la actualidad.
“Entre 1855 y 1864 algunos apellidos destinados a crear, por un lado, grupos familiares muy importantes que se van a ir reproduciendo generacionalmente y, por otra parte, gente que no está en Monterrey pero que va ocupar un grupo importante, como sería el caso de la familia Madero”, expresó Cerutti.
Por su parte, la profesora del Tecnológico de Monterrey, Eva Rivas, indicó que la economía de Nuevo León ha cambiado en diferentes etapas desde finales del siglo XIX hasta los años 70 del siglo pasado. Estos cambios han tenido efectos en la migración social, la relación con Texas o Torreón y el desarrollo tecnológico.
Sin embargo, destacó que factores como las sequías y la disponibilidad del agua han influido en el desarrollo económico de la entidad, ya sea con los cambios en los cultivos, la movilización de la producción ganadera y el avance de la petroquímica.
“Es en la década de 1940 cuando en Monterrey crece la demanda por el agua, tanto de uso doméstico en la ciudad como de procesamiento industrial, que va empezar a disputar a las regiones agrícolas y pecuarias el insumo tan escaso. Y esto se debió a una crisis hídrica que duró toda la década y terminó por apoyar a la ciudad”, apuntó Eva Rivas Sada.
Fotos: Gustavo Mendoza